Estándares de B Lab al detalle #4: Circularidad
Los estándares de B Lab son el marco de referencia que una empresa debe cumplir para ser B Corp. Desde 2006, B Lab ha evolucionado sus estándares para mejorar su impacto y aportar claridad sobre lo que significa ser una empresa líder, incorporando el feedback y sugerencias de nuestros grupos de interés y otros actores clave.
Para alcanzar estos objetivos, los estándares exigen que las empresas cumplan requisitos específicos en siete Temas de Impacto. Aunque se han desarrollado teniendo en cuenta los estándares existentes, se introducen nuevos temas y requisitos actualizados en aquellas áreas que se solapan, con el fin de mejorar el impacto empresarial. Después de todo, la comunidad B Corp se basa en el principio de la mejora continua. Las empresas deben evaluar su impacto medioambiental y tomar medidas significativas para minimizarlo tanto en sus operaciones como en su cadena de valor.
¿Cuál es el propósito del tema y por qué es importante en el mundo actual?
Se ha llegado a un punto en el que los titulares sobre tormentas, inundaciones, sequías e incendios forestales récord apenas nos sorprenden. Pero la crisis climática es solo uno de los síntomas de un desequilibrio mucho más profundo. Nuestros sistemas económicos han empujado al planeta más allá de seis de los nueve límites planetarios, que incluyen, entre otros, el cambio en el uso del suelo, el ciclo del agua dulce y la integridad de la biosfera, todos ellos esenciales para la estabilidad de la Tierra. Un millón de especies están al borde de la extinción y, aún así, seguimos introduciendo nuevas sustancias nocivas —microplásticos, pesticidas, residuos nucleares— en el medio ambiente, desestabilizando aún más los sistemas naturales de los que dependemos.
Ha llegado el momento de replantearnos nuestra relación con la naturaleza. No estamos separados del medio ambiente: formamos parte de él. Empresas, comunidades y economías enteras dependen de ecosistemas sanos para funcionar. Reconocer esta interdependencia no es solo un cambio de perspectiva; es una llamada a la acción para reimaginar cómo operamos dentro del entorno natural.
¿Cómo ha cambiado el énfasis en el tema a lo largo del proceso de desarrollo y qué factores han contribuido a ello?
La atención a la naturaleza por parte del mundo empresarial ha cobrado impulso, especialmente tras la firma, en diciembre de 2022, del Marco Mundial para la Biodiversidad de Kunming-Montreal. Este acuerdo, que compromete a 196 países a detener la pérdida de biodiversidad para 2030 y vivir en armonía con la naturaleza para 2050, ha aumentado la expectativa de que las empresas evalúen y comuniquen sus impactos sobre la naturaleza.
Nuevas normativas, como la Directiva de la UE sobre informes de sostenibilidad, así como marcos voluntarios como el Taskforce on Nature-related Financial Disclosures y la Science Based Targets Network, obligan a las empresas a comprender su impacto medioambiental y a actuar en consecuencia. En línea con esta evolución, el nuevo Tema de Impacto exige a las empresas evaluar sus impactos medioambientales y materiales en todas sus operaciones y cadenas de suministro, abandonando el enfoque voluntario anterior y convirtiendo esta evaluación en una responsabilidad fundamental.
Asimismo, la legislación está impulsando a las empresas a adoptar prácticas de diligencia debida, como la Directiva sobre Diligencia Debida en Sostenibilidad Corporativa o el Reglamento de la UE sobre productos libres de deforestación. Estas normativas subrayan la importancia de comprender y gestionar con mayor eficacia los impactos medioambientales reales y potenciales en las cadenas de suministro. Para respaldar este cambio, el Tema de Impacto hace hincapié en mejorar la trazabilidad, especialmente en relación con las materias primas de alto riesgo, que se sabe o se sospecha que causan daños medioambientales significativos. Además, se refuerza el papel de los proveedores en la prevención y mitigación de estos impactos negativos.
Al mismo tiempo, las prácticas de economía circular están desempeñando un papel cada vez más relevante en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. No obstante, crece el escrutinio sobre las prácticas circulares de las empresas, ya que a menudo se presenta la reciclabilidad como la principal acción circular. Sin embargo, la circularidad no equivale únicamente al reciclaje, lo que suscita preocupaciones sobre posibles casos de greenwashing. Por ello, el nuevo Tema de Impacto otorga mayor relevancia a la jerarquía de acciones circulares, animando a las empresas a utilizar materiales renovables, reutilizados o reciclados en lugar de materias primas vírgenes, y a eliminar los productos y envases de un solo uso. Estas prácticas deben formar parte de una estrategia más amplia para reducir la presión sobre los recursos naturales y fomentar la mejora continua mediante la progresión en la jerarquía de acciones circulares.
¿Qué aspecto destaca especialmente en el nuevo Tema de Impacto y por qué es tan relevante en la actualidad?
Uno de los aspectos más interesantes de este Tema de Impacto es el énfasis en la evaluación del impacto medioambiental material, algo cada vez más necesario a medida que la naturaleza se acerca a un punto de no retorno. Al establecer como requisito la identificación de las áreas con mayores impactos negativos dentro de las operaciones y cadenas de valor, se permite a las empresas centrar sus esfuerzos donde más importa, lo que se traduce en acciones más específicas y eficaces.
¿Qué similitudes hay entre este nuevo tema de impacto y los estándares existentes?
Este nuevo Tema de Impacto se construye sobre la base de las buenas prácticas medioambientales ya existentes. Las empresas reconocerán elementos familiares como el seguimiento del consumo de agua y energía, o la gestión de residuos. Otra área clave que se mantiene es la atención a la gestión del impacto medioambiental a lo largo de toda la cadena de suministro.
Además, el nuevo Tema de Impacto refuerza la importancia de las prácticas circulares, animando a las empresas a priorizar el uso de materiales sostenibles y a diseñar envases teniendo en cuenta principios de circularidad.
¿Cuáles son las áreas de mayor crecimiento para las empresas?
Algunos de estos conceptos pueden resultar novedosos para muchas empresas, pero son clave para impulsar un cambio significativo:
Evaluación del impacto medioambiental material: Las empresas medianas y grandes (en todos los sectores salvo el de servicios con baja huella) deberán realizar evaluaciones para identificar sus impactos medioambientales más importantes. Se proporcionarán recursos de apoyo para guiar este proceso y aclarar los resultados esperados.
Un plan de transición hacia la biodiversidad para grandes empresas: En el marco de los esfuerzos globales para detener la pérdida de biodiversidad para 2030, las grandes empresas deberán elaborar un plan específico de transición en esta materia. Esta exigencia se centrará, inicialmente, en comprometer a los proveedores de materiales, con objetivos más amplios para la cadena de valor que se introducirán gradualmente como parte del proceso de mejora continua.
Sector servicios con baja huella – clientes y proyectos: Se espera que estas empresas cuenten con un proceso para evaluar los posibles impactos medioambientales negativos de sus servicios, así como adoptar medidas de mitigación cuando sea necesario, con orientación práctica para su aplicación.
Pequeñas empresas – decisiones de compra: Se pide a las pequeñas empresas que tengan en cuenta el impacto medioambiental en sus decisiones de compra. Se les ofrecerán recursos que les ayuden a determinar la materialidad y aplicar medidas de mitigación.
Grandes empresas – trazabilidad de la cadena de suministro: Para muchas grandes empresas, los mayores impactos medioambientales se producen en la cadena de suministro. Aunque rastrear esta cadena puede ser complejo, es esencial establecer un plan claro y con plazos definidos para rastrear el origen y los impactos potenciales de materias primas de alto riesgo. La evaluación exigida en este Tema de Impacto ayuda a identificar los impactos materiales más relevantes y a determinar en qué proveedores centrarse.
¿Qué consejos deberían seguir las empresas que se esfuerzan por cumplir los estándares de B Lab y este tema en particular?
Empieza por identificar los impactos medioambientales más significativos de tu empresa, tanto en sus operaciones como en la cadena de valor, incluyendo los posibles efectos negativos sobre el bienestar animal. Estos son algunos recursos útiles para empezar:
Para pequeñas empresas: Guía conjunta de B Lab y Fairtrade International: People and Planet in Business – A simple guide to how small and micro companies can start or strengthen their due diligence.
Para medianas y grandes empresas:
Comprender cuáles son las áreas de impacto más relevantes ayudará a priorizar las acciones y garantizar que la empresa se centre en lo que realmente importa.
¿Cuál es la expectativa general de las B Corps para este Tema de Impacto?
Las empresas B Corp demuestran una gestión medioambiental responsable y contribuyen a una economía circular a través de sus operaciones y cadena de valor, minimizando los impactos negativos y generando un impacto positivo.
¿Cuáles son las diferencias más significativas entre los estándares actuales y los nuevos en relación con la gestión medioambiental y la circularidad?
Realizar una evaluación de los impactos medioambientales reales y potenciales en las operaciones y cadena de suministro dejará de ser opcional (excepto para pequeñas empresas y empresas del sector servicios con baja huella) y pasará a ser un requisito.
Este nuevo Tema de Impacto también eleva las expectativas sobre la necesidad de contar con una estrategia medioambiental para abordar impactos negativos, destacando la jerarquía de acciones circulares y los objetivos relacionados con la biodiversidad.
Además, se introduce un nuevo requisito para empresas del sector servicios con baja huella: evaluar los posibles impactos negativos derivados de trabajar con determinados clientes o proyectos y adoptar medidas correctoras cuando sea necesario.
¿Cómo responden los estándares sobre gestión medioambiental y circularidad a los distintos contextos empresariales?
Pequeñas empresas: Se les permite centrarse en acciones de mitigación sin necesidad de desarrollar una estrategia medioambiental completa, lo que evita sobrecargar sus recursos y facilita una actuación significativa.
Grandes empresas: Se espera de ellas una estrategia específica sobre gestión del agua y un plan de transición hacia la biodiversidad.
Cadena de suministro: Las pequeñas empresas deben demostrar que sus prácticas de adquisición consideran los impactos ambientales, mientras que a las grandes se les exige comprometer a sus proveedores para mitigar los impactos negativos reales y potenciales, y disponer de una hoja de ruta de trazabilidad para sus materias primas de alto riesgo.
Sector servicios con baja huella: Se les exige actuar en su principal área de impacto potencial: los clientes y los proyectos que aceptan.
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